domingo, marzo 27, 2011

LA ESCONDIDA

Jugamos con ella hasta que un día ella juega con nosotros.

Hasta entonces había permanecido oculta, como en el juego infantil de “la escondida”. Cuenta hasta cien con los ojos cerrados y sal a buscarnos. Luego hasta cincuenta y hasta veinte y diez y cinco, y hoy simplemente sal a encontrarnos.

Ya no somos tantos porque a menudo has dado con uno de nosotros. Cada vez es más difícil esconderse y que te desorientes, cada día estás más lista, has aprendido a desechar los escondites habituales y vas por los otros, los más raros, los reales:

Por ejemplo esta tristeza, la temida sensación del náufrago en su mar sin costas, el ayer con nombre propio que no puedo evitar y que te está llamando.

No hay comentarios:

Publicar un comentario